En Paradela existe una fábrica de fuelles desde hace más de 40 años. Fuelles Miragaya.

¿Sabéis lo que es un fuelle?

La descripción que nos da wikipedia es la siguiente:

Instrumento que atrapa aire del exterior y lo lanza con fuerza en una dirección; consiste en una especie de caja con paredes plegables o flexibles que cuando se llena de aire se abre y para expulsarlo se cierra.

Y es que el fuelle es una herramienta milenaria. Un pieza de uso doméstico que sirve para avivar la llama y/o las brasas. Así como también para realizar fumigaciones manuales. Por ello existen diversas tipologías y tamaños de fuelles.

Fuelles Miragaya es el nombre de ésta fábrica paradelense. Un negocio con larga historia en nuestro municipio; el cual hace poco más de un año fue traspasado al emprendedor José Elito Carrasco, lucense de 45 años residente desde hace 10 años en Paradela.

Que según me cuenta: “hacía mucho tiempo que deseaba poder gestionar mi propio negocio”. Antes de liderar ésta aventura empresarial, Elito ya había gestionado otras actividades propias; sin embargo se puede decir que Fuelles Miragaya es un modelo de negocio empresarial con el que verdaderamente se siente pleno.

La vocación y formación de Elito es la mecánica automovilística. Fuelles Miragaya le permite realizar un trabajo en el que se mezclan: la mecánica, la artesanía, así como la dirección y el liderazgo de un proyecto empresarial exitosamente rentable.

El material usado para realizar el fuelle destinado a avivar la lumbre, es tradicionalmente la madera de pino. Una madera excelente para elaborar este objeto. El proceso de elaboración no es complicado pero sí complejo. La producción artesanal de Fuelles Miragaya se realiza manualmente con la ayuda de maquinaria especializada con la que: se sierra el par de maderas que necesita cada fuelle, a éstas se las da forma, se pulen, incluso algunas se tintan para aportarles color en algunas ocasiones, se sistema su mecanismo, se rematan los detalles con cuero de oveja o vacuno así como se finalizar su decoración con dibujos con motivos vegetales, o bien elementos tradicionalmente gallegos como es la vieira jacobea.

La demanda de fuelles es tan alta que Fuelles Miragaya no sólo vende a distribuidoras a nivel nacional, sino que también exporta a países como Francia y Portugal. Con una media de salida de mercancía de 1000 fuelles por semana.

Es realmente admirable que haya personas como Elito, que deciden apostar por proseguir y no dejar morir una actividad de producción tan particular y tradicional, como es en este caso la fabricación de fuelles, un elemento sencillo, muy simple. Pero puramente artesanal.